El hecho se registró la noche del sábado, cuando la Dra. Natalia Villalón era la única facultativa atendiendo en la Urgencia del recinto. Resultó con lesiones leves en su cara y brazo luego que la madre de un niño que esperaba atención la atacara lanzándole el monitor de un computador. “Esa no es la forma de solucionar los problemas. Nosotros sólo somos la cara visible de un sistema que no funciona como debería. No tenemos la culpa de la falta de insumos, de médicos, de horas disponibles”, señaló la afectada.
Siguen sumándose hechos de violencia en recintos asistenciales del país. Esta vez, fue el turno del Hospital San Juan de Dios de Vicuña, donde la Dra. Natalia Villalón Díaz, quien estaba realizando su turno de noche, fue agredida por el familiar de uno de los pacientes.
La facultativa relata que recibió el turno con varios traslados pendientes al Hospital de La Serena y cerca de 10 pacientes en espera categorizados C4 y C5. Mientras hacía las derivaciones, se le acercó una mujer para que recategorizaran a su hijo. Se le evaluaron los signos vitales, los cuales estaban normales, por lo que se le explicó que iba a tener que esperar que se le diera atención primero a los pacientes más graves.
“Ella se molestó y dijo que iba a poner un reclamo, porque no podía ser que yo fuera la única doctora atendiendo. En ese momento, llegó una urgencia desde el SAMU, examiné a la paciente y mientras estaba en el mesón de enfermería haciendo una orden de rayos, volvió la madre del niño, golpeó la mesa, me increpa, señalando que se va a llevar a su hijo y que si empeora, sería culpa mía, porque le negué la atención. Entonces, toma el monitor del computador y me lo arroja, golpeándome en el mentón, el pecho y en un brazo”, relata la Dra. Villalón.
El Presidente del Consejo Regional La Serena del Colegio Médico, Dr. Rubén Quezada lamentó este hecho. “El nivel de violencia que se genera en nuestra sociedad también se encuentra en nuestros servicios de salud, siendo cada vez más frecuente leer en las noticias agresiones, malos tratos y conflictos al interior de nuestros establecimientos”, señaló.
Asimismo, detalló que para enfrentar esta situación y formar parte de las soluciones, mañana lunes visitará el Hospital San Juan de Dios de Vicuña, donde se reunirán con la dirección del Servicio de Salud Coquimbo y la Municipalidad de Vicuña para implementar soluciones inmediatas a la situación ocurrida e iniciar el trabajo para disminuir el riesgo que se repitan. Además informó que la Fundación de Asistencia Legal de la Orden (FALMED), ya se contactó con la Dra. Villalón para ser parte de las acciones legales correspondientes.
El Vicepresidente del Colegio Médico, Dr. Patricio Meza, se puso en contacto con la víctima y el Dr. Quezada, para expresar el apoyo de la Directiva Nacional. “Como Colegio Médico, no queremos quedarnos sólo en las palabras. Seguiremos presionando para que las autoridades tomen cartas en el asunto. Esto no sólo afecta a nuestros colegas y a los equipos de salud, también a los pacientes que también se han visto afectados por la violencia y sus consecuencias, ya que al ser agredido un médico, se pierde un profesional en el turno o siguen atendiendo con temor, lo que repercute en la calidad de la atención que se les entrega”.
El Gremio ha instado a las autoridades a tomar medidas para aumentar la seguridad en los recintos asistenciales. En este sentido ha concretado reuniones con la Subsecretaría de Prevención del Delito y el Ministerio de Salud, con lo que consiguió la conformación de una Mesa Nacional de Agresiones contra el personal de salud, donde es representado por la Secretaria General de los Médicos Generales de Zona, Dra. Carol Muñoz, y que convoca también a la Confederación Nacional de la Salud Municipal (Confusam) y la Asociación Chilena de Municipalidades.
Lo preocupante de esta situación es que la Dra. Villalón afirma que no es un hecho aislado. “Han prometido dañar nuestros vehículos, nos han ofrecido golpes, amenazas de hacerle algo a nuestras familias, amenazas de muerte. A un paramédico le quebraron la nariz, habían roto los vidrios de la urgencia. Eso perjudica nuestra atención, porque no tenemos la seguridad”, asegura.
El Hospital San Juan de Dios de Vicuña no cuenta con rondas de carabineros, chapas en las puertas de emergencia, botón de pánico, guardias ni cámaras de seguridad. Los integrantes del equipo de salud solicitan guardias las 24/7, portones eléctricos, ventanillas de vidrio para el personal de admisión, apoyo sicológico y legal a las víctimas, y más médicos, para poder atender más y disminuir los tiempos de espera.
Finalmente, la Dra. Villalón hace un llamado a los usuarios, para abordar los conflictos de otra manera: “Esa no es la forma de solucionar los problemas. Nosotros sólo somos la cara visible de un sistema que no funciona como debería. No tenemos la culpa de la falta de insumos, de médicos, de horas disponibles. Hacemos nuestro mejor esfuerzo para atenderlos y estamos ahí por los pacientes. Lo mínimo que exigimos es respeto, por un trabajo que hacemos con vocación”.