El Instituto de Políticas Públicas de Salud (IPSUSS) de la Universidad San Sebastián realizó el miércoles 12 de agosto el encuentro que buscaba dar respuesta a la interrogante; ¿qué hacer para cerrar la brecha de profesionales de la salud que hay en el país?, a través de un debate constructivo y en el que se analizó un problema que se arrastra por décadas en Chile.
Respecto a la formación y distribución de los profesionales del área de la salud debatieron el Presidente del Colegio Médico, Dr. Enrique Paris; el consejero del Regional Santiago, Dr. Pablo Araya; el director de la carrera de Kinesiología de la USS, Cristián Contador; y el director del Centro Estudios de la misma entidad, Fabián Riquelme; la enriquecedora discusión fue moderada por el decano de la Facultad de Medicina de la USS, Dr. Luis Castillo.
Colegio Médico participó en la actividad organizada por el Instituto de Políticas Públicas de Salud de la U. San Sebastián, en que se plantearon propuestas para disminuir la brecha.
El Dr. Paris manifestó que además de la falta de especialistas en el país, existe una mala distribución de profesionales de la salud. “El 57{ee7e87f9e0e73f133bf1bc4058c4ab7bf8ca9a244c464f6fb73806cbfeac9629} de los médicos especialistas están en Región Metropolitana, Concepción, Valparaíso y en el resto de las regiones faltan facultativos. A esto se suma el déficit de algunas especialidades como anestesiólogos, por ejemplo. Por lo tanto, hay que buscar algunas soluciones como formar más médicos, distribuirlos en forma homogénea en todo Chile y tener un programa de formación de especialista a largo plazo”.
El dirigente agregó que el Colegio Médico no está en contra de los médicos extranjeros, pero deben cumplir con la normativa vigente del país, es decir, rendir el Eunacom y certificar su especialidad. También indicó que la atención primaria es fundamental para desarrollar un sistema de salud público adecuado para la población. “Nos faltan especialistas en el primer nivel de atención. El atochamiento que vemos en los hospitales, se debe a que la atención primaria no es resolutiva. Hay que discutir si ésta debe seguir en el ámbito municipal o volver al ministerio de Salud. Además en Chile tenemos que hacer un pacto por la salud que involucre a todos los actores del sistema para solucionar esta problemática”.
Al cerrar su intervención, el Dr. Paris señaló que estaba de acuerdo con la obligatoriedad de trabajar en el sistema público, una vez egresado de la carrera de medicina. “Sí, debe existir esta obligación, ya que más del 90{ee7e87f9e0e73f133bf1bc4058c4ab7bf8ca9a244c464f6fb73806cbfeac9629} de las becas de formación de postgrado, las otorga el Estado de Chile, es decir, la pagamos todos nosotros. Me parece inconcebible que un médico que haga una beca o especialización y que el Estado la cancele, no devuelva a los habitantes del país con un trabajo en los lugares más necesitados. Como Colegio Médico vamos a estar en contra de que no se pague la beca. El programa de Médicos Generales de Zona es una gran política de salud que permite llevar la atención en áreas rurales y alejadas y donde los profesionales aprenden a trabajar con el resto del equipo de salud”.
En tanto el Dr. Araya expresó que en otros países existe una planificación a largo plazo, 20 ó 40 años, con institutos que se dedican a estudiar el problema de distribución y falta de especialistas, y que trascienden más allá de los gobiernos. “Eso requiere nuestro país: un instituto que haga este trabajo de verdad”. Además mencionó que no estaba de acuerdo con obligar por ley a los médicos a trabajar en el sistema público, una vez que terminan sus estudios. “Debe existir la opción de seguir otros caminos. Si quiero hacer una carrera pública, entonces iré 2 ó 3 años al sistema primario y después postularé a una beca. No comparto la obligatoriedad mediante una ley”.
En la jornada se presentó una encuesta realizada por IPSUSS en que se señala que el 20 {ee7e87f9e0e73f133bf1bc4058c4ab7bf8ca9a244c464f6fb73806cbfeac9629} de los entrevistados se encuentra en lista de espera para alguna atención de salud. De ellos, 45 {ee7e87f9e0e73f133bf1bc4058c4ab7bf8ca9a244c464f6fb73806cbfeac9629} lleva más de seis meses esperando que lo llamen y 47 {ee7e87f9e0e73f133bf1bc4058c4ab7bf8ca9a244c464f6fb73806cbfeac9629} siente que su salud ha empeorado en este tiempo.