El año pasado cumplió 50 años de profesión, pero su salud ya estaba debilitada, lo que le impidió participar del homenaje que el Colegio Médico de Rancagua tenía preparado para él. Pero si alcanzó a celebrar sus 50 años de matrimonio, de feliz matrimonio, como así nos explica su Señora, Teresa Reed.
“A casi un año de su partida, son muchos los legados que dejó este cirujano, no sólo en sus colegas, sino también en todos sus pacientes y en especial en su familia”
“la medicina para mi marido estaba primero en su vida, en segundo lugar nosotros, su familia. Era su pasión, pues en alguna oportunidad me comentó que “pensar que me pagan por hacer lo que más me gusta”. Por eso trabajó hasta el último día”.
El amor de esta pareja nace en Concepción, donde ambos estudiaban y cursaban el último año de sus carreras, él medicina, ella Enfermería. Fue un amor a primera vista, al terminara sus carreras se casaron y partieron juntos en este proyecto de vida, que cumplió medio siglo y que cuenta con tres hijos y 5 nietos.
Las cualidades para definir a su marido son muchas, la Sra. Teresa no duda en nombrarlas una a una “era un hombre especial mi marido, era un maravilloso cirujano, un maravilloso profesional y un más maravilloso ser humano. Destaco su honestidad, su responsabilidad”. Vivieron en Talca, Santiago y Rancagua.
Entres sus hobbies estaba pescar, actividad que también hacía en compañía con su señora, mientras el pescaba, ella lo esperaba en la cabaña que tienen en Las Leñas, siempre juntos, otro de los pasatiempos era cocinar, lo que también practicaba junto a su mujer.
Fueron varias generaciones que le toco atender en su consulta, en sus 50 años de profesión, pacientes y colegas que lo recuerdan con especial afecto.
El Consejo Regional del Colegio Médico de Chile se reunió con los hijos y la Señora del Dr. Cipriano Fernández, donde le hicieron entrega del reconocimiento por los 50 años de profesión de este destacado Médico.
Al consultarle a la Sra. Teresa, de cómo le gustaría que recordaran al Dr. Fernández, comentó que “como un buen profesional y una muy buena persona, que es lo más importante y eso era él, un hombre maravilloso”.
Fueron muchos los rancagüinos que despidieron al destacado Dr. Cipriano Fernández, para agradecer su entrega, amistad y compañerismo.
Un recuerdo que perdurará en la retina de muchas personas, en especial, de su amada familia, la que estuvo con él, hasta el último momento.
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