Su irrestricto apoyo manifestaron los representantes del Colegio Médico de Chile al director del Hospital Gustavo Fricke de Viña del Mar, Dr. Leonardo Reyes, ante el complejo escenario en que se encuentra el establecimiento por la extensa movilización que lleva adelante un grupo de funcionarios, la que ya supera los 40 días.
Presidente Nacional de la Orden, Dr. Enrique Paris, dijo que el Servicio de Salud debe tomar las medidas necesarias para devolver la normalidad de la atención al hospital viñamarino.
El Presidente Nacional del Colegio Médico, Dr. Enrique Paris, quien se reunió en asamblea con médicos, dentistas, químico farmacéuticos del hospital viñamarino, llamó a la autoridad del Servicio de Salud Viña del Mar-Quillota (SSVQ) a “tomar cartas en el asunto” y aplicar las sanciones que correspondan.
“Cuando vemos todos los días en la prensa la cantidad de gente que queda sin atención, que muere, que está esperando una intervención quirúrgica, y aquí hay funcionarios que impiden que el hospital trabaje bien, creo que la autoridad tiene que tomar cartas en el asunto”, afirmó. Además, el facultativo dijo creer que “la autoridad (el director del SSVQ) ha sido débil en estas circunstancias. La autoridad debe aplicar las sanciones y este hospital tiene que volver a trabajar a pleno, porque un grupo pequeño de personas no puede tener paralizado un hospital, un grupo pequeño de personas vociferantes y gritones no puede impedir que nuestros médicos y nuestros profesionales atiendan a los pacientes”, indicó el Dr. Paris.
Para el presidente regional de la Orden, Dr. Juan Eurolo, los grandes obstáculos en la normalización del hospital que intenta llevar a cabo el director del centro hospitalario son la actitud irreflexiva de los funcionarios movilizados y la falta del apoyo de la dirección del SSVQ. “El director del hospital ha hecho una serie de medidas para poder normalizar el trabajo y esto se ha visto impedido desde dos lados. Por un lado, los funcionarios que han sido irreflexivos y no han aceptado dialogar para poner fin a sus movilizaciones, y por otro lado, por lo menos al comienzo del movimiento, un director de servicio que no manifestó el apoyo que correspondía al director del hospital en estas medidas”.
Lo que más preocupa a los médicos es que la movilización de los funcionarios compromete servicios claves para el funcionamiento del hospital –como esterilización y farmacia, entre otros– con lo que impiden la adecuada atención de los pacientes, generándose así un mayor aumento de la lista de espera quirúrgica. Esta situación es especialmente crítica en el caso de pacientes oncológicos, que deben cumplir con protocolos que tienen plazos precisos. De no respetarse estos plazos, el paciente pierde la oportunidad de combatir exitosamente su cáncer, con las dramáticas consecuencias que ello puede tener.
Por otro lado, en relación a las denuncias que han realizado los funcionarios movilizados en contra de los médicos, el Dr. Hugo Reyes, presidente de la Asociación de Médicos Odontólogos y Químico Farmacéuticos (AFUMOQ), fue enfático en señalar que éstas deben respaldarse con pruebas y no ser realizadas de manera irresponsable. “Las acusaciones tienen que probarlas porque yo puedo acusar al voleo y después no hacerme responsable. Aquí, si hay una acusación, que traigan las pruebas y se van a aplicar las sanciones que correspondan”, afirmó. En el mismo sentido se pronunció el Dr. Enrique Paris, quien indicó que “si hay un médico que haya actuado contra la ética también es merecedor de un sumario. La ética es lo más importante”.
Finalmente, el presidente nacional del Colegio Médico agregó que el complejo escenario de movilizaciones en el hospital viñamarino se discutió el pasado 28 de abril, en la reunión del Consejo General de la Orden, instancia que acordó insistir ante la ministra de Salud para que se tomen las medidas necesarias tendientes a la normalización del Hospital Fricke.
